EL VOLCAN CERRO NEGRO

Cerro Negro, el volcán más joven de Centroamérica nació en abril de 1850 y es uno de los volcanes más activos de la región. Ha estado produciendo erupciones estrombolianas frecuentes, fuentes de lava ocasionales y flujos de lava y potentes erupciones explosivas cada pocas décadas.

La bajada se puede hacer en las arenas volcanicas en trineo o a pies.

VOLCAN MASSAYA

El  Parque Nacional Volcán Masaya cuenta con una superficie de 54 kilómetros cuadrados e incluye dos volcanes y cinco cráteres. Los volcanes han entrado en erupción varias veces en la historia, y fueron temidos por los pueblos indígenas y los Españoles, pues, se bautizan el volcán activo "La Boca del Infierno". Hoy en día, se puede caminar hasta el borde del volcán para observar el impresionante cráter, que emite continuamente humo y gases de azufre. Desde el cráter, se puede ir de excursión en diferentes senderos que conducen a otros cráteres y a la cueva de murciélagos Tzinancanostoc.

 VOLCAN TELICA

Se encuentra a unos 30 km de León, mide 1.061 metros con un enorme cráter de 120 metros de profundidad y 700 metros de diámetro. Disfrute de un paseo por los campos de maíz y la naturaleza para llegar a los pies del volcán, luego el ascenso es de dificultad moderada. Cuando está oscuro, se puede ver la lava hirviente y brillante en las profundidades del cráter. (Tiempo de recorrido total: 12 horas) Debido a la duración del viaje, es posible pasar la noche al pie del cráter.

VOLCAN MADERAS

Es el menor de dos volcanes en la Isla de Ometepe, pero se eleva a más de 1.300 metros. A diferencia del otro volcán en la isla, Concepción (notablemente uno de los más exigentes para escalar), el volcán Maderas nunca ha sido conocido activo. La caminata para llegar a la cumbre toma alrededor de tres horas y media y luego se puede seguir hasta la laguna para observar la vida silvestre. (Tiempo de recorrido total: 6 horas, Nivel: Medio)

VOLCAN MOMOTOMBO

Símbolo de Nicaragua por su simetría, hizo historia en 1609 cuando una violenta erupción obligó a los habitantes de la antigua ciudad colonial de León (León Viejo) para mover más lejos del volcán. También se desató en 1905 y, recientemente, en abril de 2000, se midió la actividad volcánica. Debido a las altas temperaturas (que exceden los 500°C), se debe obtener una licencia de la empresa que gestiona la planta geotérmica para poder subir al volcán. (Tiempo de recorrido total: 8 a 10 horas, Nivel: Difícil)